La ginecóloga y obstetra Libni Valenzuela advierte que el sedentarismo y el retraso de la maternidad son factores clave del incremento global de la infertilidad, mientras el doctor Steven Rabassa resalta la necesidad de abordar el problema desde una visión integral de la medicina reproductiva.
La ginecóloga y obstetra Libni Valenzuela alertó que la infertilidad está aumentando a nivel mundial, impulsada por factores como el sedentarismo y el retraso de la maternidad, una tendencia que podría afectar hasta al 60% de la población entre 2030 y 2050.
Durante su programa “Crónicas de Salud”, la doctora Valenzuela explicó que la preservación de la fertilidad, especialmente mediante la congelación de óvulos, es una alternativa esencial para las mujeres que desean postergar la maternidad sin comprometer sus posibilidades de concebir en el futuro.
En ese contexto, destacó la creación de la Asociación Dominicana de Medicina Reproductiva (Adomer), una entidad que busca agrupar, educar, investigar y regular la práctica de la medicina reproductiva en República Dominicana.
“Adomer surge como respuesta a la necesidad de establecer estándares de calidad, ética y formación en el ámbito de la reproducción asistida”, señaló Valenzuela, quien subrayó la importancia de identificar y capacitar a los profesionales que ofrecen estos servicios sin la debida preparación.
Asimismo, enfatizó que educar a la población sobre los riesgos de la infertilidad y las opciones de preservación es fundamental para revertir las tendencias actuales.
De su lado, el doctor Steven Rabassa, CEO de Procrear RD, resaltó que la medicina reproductiva abarca múltiples factores, entre ellos problemas inmunológicos y el retraso de la maternidad, siendo este último el principal y más común, asociado principalmente a causas sociales.
“El reloj biológico femenino es real. A la mujer se le acaban los óvulos”, puntualizó Rabassa, al tiempo que recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha indicado que una de cada 26 parejas presenta o presentará problemas de infertilidad.
Ambos especialistas coincidieron en que el retraso voluntario de la maternidad, sumado al estilo de vida sedentario, está afectando de forma significativa la salud reproductiva, por lo que insistieron en la educación, la prevención y la regulación médica como herramientas claves para preservar la fertilidad en el futuro.